José Gómez del Castillo es un hombre inquieto y al que le encantan las relaciones personales,
hombre de su tiempo tampoco vive de espalda a las nuevas tecnologías ni a la
actualidad pero si hemos decir algo destacable que le diferencia del resto de
las personas de su edad en su barrio es, que José Gómez, también es actor.
Nació un 16 de junio de 1964 en una familia humilde y
a pesar de que, de vez en cuando, tenga necesidad de algún que otro apoyo, se siente uno más en su barrio.
Amigo de sus amigos y muy conocido en Pozuelo de Alarcón,
desde joven, el cine ha sido su pasión y por ello no dudó en presentarse al casting de la película “Leo” cuando se lo sugirió la directora de Afanias, entidad con la
que lleva vinculado desde 1984 cuando empezó a acudir al centro ocupacional, fue en ese momento, en el año 2000, cuando su vida dio un giro y el gusanillo del cine le picó definitivamente, le dieron el papel, y bajo las ordenes de José Luis Borau fue parte del elenco de actores junto con Icíar Bollaín
José tiene necesidad de apoyo, a nivel físico, sensorial
e intelectual, pero eso no le ha hecho encerrarse en si mismo, si no todo lo
contrario. De carácter luchador, en la actualidad cuenta con un puesto de trabajo
en el aeropuerto Adolfo Suarez como mozo
de almacén, aunque también ha trabajado como
manipulador de papel u ordenanza.
Como hemos mencionado con anterioridad el gusanillo
de ser actor le picó en el casting de “Leo” pero también ha actuado en capítulos
de la serie “El comisario”, “Hospital Central” y en una de las últimas campañas
de FEAPS con el papel de “Super Jose”
Como anécdota en su trayectoria artística podemos
decir que le dejó las cosas bien claras a José Luis Borau cuando le indicó que no
necesitaba a nadie que le hiciera café que lo podía hacer "el solito", así que nada
de asistente personal durante la grabación de la película, él era uno más y fue
desde entonces cuando surgió una gran amistad entre ellos.
José considera que superar las barreas que pone la vida no
es fácil para nadie pero que las personas con discapacidad lo tienen aun un poco más difícil, se van dando pasos
por la inclusión, pero todavía quedan prejuicios en lo que respecta a las
personas con diversidad y su capacidad para hacer según que cosas, por
ello en muchas ocasiones se tiende a
maquillar la realidad.